Los discursos parlamentarios de Práxedes Mateo-Sagasta

El Sr. Ministro de la GOBERNACIÓN (Sagasta): Parece ser que el Sr. Romero Robledo ha creído ver ciertas censuras en algunas de mis palabras. No sé cómo las habré dicho, pero mi argumento era el siguiente: algunos individuos de la mayoría presentaron una proposición, adhiriéndose a los aplausos de la Cámara al discurso del Sr. Ministro de Ultramar, y aprobando la conducta del Gobierno en las cuestiones de Ultramar; y cuando uno de sus autores, el Sr. Romero Robledo, se levantó a apoyar la proposición, se ausentaron algunos individuos de la oposición, y se levantaban otros para hacer lo mismo. En su consecuencia, dije yo que convenía retirar la proposición, porque no habiendo unanimidad, no convenía quitar su efecto al discurso del señor Ayala, que había sido aplaudido por toda la Cámara, mientras la proposición podía no ser votada en la misma forma. De aquí no creo que se desprenda cargo alguno para S.S., sino para las oposiciones, que han convertido en cuestión de partido una cuestión nacional.